Dice un antiguo proverbio árabe que “el que no viaja desconoce el valor de los hombres y de las mujeres”. ¡Qué gran verdad!.
Aunque nuestros viajes de Mundo Moucho están encaminados a conocer las maravillas naturales de los diferentes ecosistemas de este planeta, sería un error imperdonable separar esto del trabajo de los hombres y mujeres de los diferentes pueblos que aún mantienen una relación cercana con las inclemencias, las dádivas y las dificultades que la madre Tierra les ofrece. La relación de los hombres y las mujeres con la naturaleza es parte esencial de la evolución de la Historia Natural y de la conformación de los pueblos y paisajes que han llegado hasta nuestras generaciones.
Como divulgadores de estos contenidos, nuestro viaje a Jordania fue único. Aprendimos a vivir y dormir en el desierto de la mano de auténticos beduinos, a conocer las especies de plantas, vertebrados e invertebrados que pueblan estos ecosistemas en los que la vida es muy dura y agresiva y en los que la adaptación al medio está en los genes de los beduinos. Y a mayores, el paisaje, la conformación geológica de lo que fue, hace millones de años, un océano por el que ahora transitamos.
Un lujo de viaje al que hay que sumar la calidad humana de nuestros viajeros y viajeras que hicieron de este periplo algo inolvidable en nuestras vidas. ¡Repetiremos!
